¿Tienes una cena imprevista y no dispones de mucho tiempo para cocinar? Prepara estos tiernos y sabrosos triángulos a base de queso y beicon. Son muy fáciles de hacer y estarán listos en 30 minutos.
Cortamos el bacon en dados, los champiñones en finas láminas y los rehogamos en una sartén con un poco de aceite de oliva.
Mezclamos el bacon y los champiñones en un bol con el queso en daditos y el perejil fresco picado. Reservamos.
Aplanamos las rebanadas de pan con la ayuda de un rodillo y rellenamos con la mezcla anterior. Doblamos en forma de triángulo y cerramos la ayuda de un tenedor.
Colocamos los triángulos en una bandeja con papel de hornear, los pintamos con huevo, horneamos 10 minutos a 180 ºC y… ¡a disfrutar!