Las alitas de pollo, son un plato estrella entre los niños. Hoy te proponemos una versión fácil de hacer, suave de sabor (sin picantes ni sabores demasiado fuertes) y acompañada de una deliciosa salsa casera de zanahoria y de unas patatas paja al horno. El horno nos permite hacer cocciones deliciosas, sin necesidad de añadir demasiado aceite o de freír. En esta receta se preparan tanto las alitas como las patatas en el horno. La salsa de zanahoria también se puede hacer con otras variedades de frutos secos, como nueces, avellanas, piñones…. Y también se puede preparar sin la mostaza, o añadiendo un poquito más de cantidad, en función de las preferencias de cada niño.
Maceramos las alitas de pollo con la siguiente mezcla: 4 cucharadas soperas de aceite de oliva, 1 cucharada sopera de ajo en polvo, un poco de perejil fresco picado, pimienta y sal. Horneamos a 190 ºC durante 35-40 minutos.
Pelamos las patatas y las cortamos en juliana. Las disponemos en una bandeja, junto con un poco de aceite y sal. Las cocinamos a 190 ºC durante 35-40 minutos.
Pelamos las zanahorias, las cortamos a dados y las cocinamos al vapor durante 15 minutos. Seguidamente, las trituramos junto con las avellanas, la mostaza Dijon, un chorrito de aceite de oliva y sal al gusto. Si es necesario, añadimos un poquito de agua, hasta conseguir la textura de salsa deseada.
Servimos las alitas de pollo junto con las patatas paja y la salsa casera de zanahoria.