Pelamos los plátanos de Canarias y los caquis, los troceamos y los echamos al vaso de una batidora. Añadimos el yogur griego y trituramos hasta obtener una consistencia cremosa, espesa y sin grumos. Es recomendable que la fruta esté muy fría para que el smoothie bowl esté frío al consumirlo. Se puede conservar en la nevera hasta el momento de servir.
Servimos el smoothie en un bowl grande y preparamos el topping.
Cortamos varias rodajas delgadas de plátano de Canarias y las disponemos alineadas, en la parte lateral de la superficie del bowl. A continuación, disponemos unas rodajas de kiwi, espolvoreamos muesli Premium, añadimos por la superficie del bowl unas frambuesas y arándanos frescos y finalizamos con chocolate negro del 95% de cacao picado.