Empezamos calentando la leche de almendras en un cazo a fuego medio. En otro distinto, calentamos el aceite de oliva y le añadimos la harina de trigo. Sin retirar del fuego,removemos con una varilla hasta que la harina esté ligeramente tostada.
Cuando la bebida vegetal esté caliente, vertemos un poco en el cazo con aceite y harina. Removemos constantemente con la varilla para evitar que queden grumos, hasta que se integre perfectamente. En caso de grumos, podemos terminar con la batidora.
Repetimos el proceso hasta terminar la leche de almendras. La añadimos caliente y poco a poco para que no haya cambio de temperaturas en la receta, la harina se disuelva más fácilmente y la salsa se cocine más rápido.
Dejamos cocinar a fuego medio durante unos 10 minutos sin dejar de remover hasta espesar la salsa a nuestro gusto y que la harina se cocine por completo. Salpimentamos y… ¡a disfrutar!
Podemos sustituir el aceite de oliva por otras grasas vegetales como margarina o aceite de girasol.
La leche de almendras se puede sustituir por cualquier bebida vegetal que nos guste más como por ejemplo, la de avena o arroz. Que sea suave y no nos aporte mucho sabor dulce a la elaboración.
Utilizamos varilla para evitar que quede una salsa con grumos y conseguir un resultado más suave al paladar.
Añadimos la bebida vegetal caliente poco a poco para que no haya cambio de temperatura en la receta, la harina se disuelva más fácilmente y la salsa se cocine más rápido.
Si se desea hacer la bechamel vegana libre de gluten, podemos cambiar la harina de trigo por otras harinas sin gluten como por ejemplo, la harina fina de maíz, pero entonces cambiaría el proceso. Habría que diluir primero la harina fina de maíz en la leche de almendras, después se añadiría el aceite, y se calentaría hasta espesar.
Cocinamos a fuego medio-lento durante determinados minutos para que la harina se cocine y no aporte un sabor excesivo a nuestra receta.
Si queremos una bechamel más líquida, tan solo tendremos que añadir menos cantidad de harina o añadir más bebida vegetal. Si lo que queremos es una salsa más espesa, tendremos que hacer lo contrario, añadir más cantidad de harina y aceite, y menos bebida vegetal.
Si no conseguimos quitar los grumos, podemos ayudarnos de una batidora para eliminarlos.