Cortamos el melón y la sandía a dados y los ponemos (por separado) en bolsas aptas para congelar. Congelamos un mínimo de 24 horas.
Con ayuda de una picadora trituramos el melón por un lado y la sandía por otro. Nos tiene que quedar una textura tipo granizado. Rellenamos los moldes de helado (que tengan forma redonda y con un palo) alternando melón y sandía. Congelamos de nuevo unas 12 horas como mínimo.
Con ayuda de una mano de mortero (o trituradora), trituramos las avellanas y las nueces hasta que se forme una pasta cremosa. Sacamos los helados del congelador, los quitamos del molde y untamos una cara con una fina capa de crema de frutos secos.
Seguidamente fundimos el chocolate negro, partiéndolo en trozos pequeños y poniéndolo en el microondas en tandas de 30 segundos y removiendo. Bañamos los helados en chocolate negro y guardamos en el congelador mientras deshacemos el chocolate blanco, siguiendo el mismo proceso. Con este haremos pequeños detalles para dar forma a nuestro gato. Dibujamos cuatro pequeñas patas, una nariz, unos bigotes, una boca y unas pequeñas orejas para dar forma de gato. Guardamos de nuevo en el congelador unos minutos para que el chocolate blanco se endurezca ¡listo para tomar!
¡Disfruta de este delicioso polo casero de fruta con crema de frutos secos y chocolate!