Para los huevos: cocemos los huevos en una olla con agua hirviendo durante 10 minutos. Pasado ese tiempo, enfriamos, pelamos y cortamos por la mitad. Reservamos.
Para la merluza: cortamos el ajo y la cebolleta en dados pequeños y los rehogamos en una sartén amplia con aceite de oliva. Cuando la cebolla esté transparente, agregamos la harina de trigo y removemos hasta dorar ligeramente.
Añadimos el caldo de pescado, el txakoli, los guisantes y el perejil, y removemos enérgicamente para que se integren. Cuando el conjunto se haya espesado, agregamos los lomos de merluza ya descongelados y los cocinamos 4 minutos por cada lado.
Incorporamos las almejas previamente descongeladas en los últimos 4 minutos junto con los espárragos en porciones. Sazonamos y removemos el conjunto ligeramente. Emplatamos, decoramos con los huevos reservados y… ¡a disfrutar!
Cuando hablamos de cocinar pescados o carnes, hay vida más allá de hacerlos a la plancha vuelta y vuelta. Esta receta es un perfecto ejemplo, aparte de ser un plato típico de la gastronomía vasca.
A nivel nutricional, es un plato denso y contundente, con un aporte de proteínas de calidad como es la merluza, los huevos cocidos y las almejas, y una pequeña cantidad de hidratos de carbono con la harina de trigo. Es un buen plato principal, que mejoraría si lo acompañamos de una buena fuente de verduras, por ejemplo, con una ensalada de primero.
Si queremos hacer una variante vegana, podemos utilizar filetes grandes de tofu para tener una textura parecida a la merluza al guisarlos. Para tener un sabor a mar parecido, podemos usar alga nori para envolver los filetes de merluza.
Junto con revisar el resto de ingredientes etiquetados para asegurarnos que no haya trazas de gluten, deberíamos usar una harina que no fuera de trigo, por ejemplo, de maíz, garbanzo o arroz, para tener una receta apta para personas con celiaquía.
Para la merluza a la vasca
Para los huevos cocidos