Para el salmorejo: trituramos los tomates en porciones y colamos. Añadimos la miga de pan y reservamos durante 10 minutos aproximadamente para que empape. Trituramos el conjunto con el ajo y añadimos el aceite poco a poco. Ajustamos el punto de sal y reservamos.
Para las láminas de gambón: pelamos los gambones previamente descongelados y los colocamos sobre papel de horno formando un círculo. Cubrimos con otro papel de horno y machacamos y estiramos con un rodillo. Reservamos en el congelador hasta que se enfríe.
Disponemos las láminas de gambón en una vaporera y cocinamos durante 3 minutos aproximadamente. Por otro lado, tostamos los piñones, retiramos y salteamos las ciruelas en cuartos hasta dorar.
En el plato que más nos guste, vertemos el salmorejo y disponemos las láminas de gambón. Decoramos con las ciruelas, cebolla en juliana, los piñones, unos puntitos de crema balsámica y… ¡listo para disfrutar!.
¡Qué maravillosa receta esta de hoy! Ideal para iniciar esta temporada de meses calurosos. Más sencilla de realizar imposible, apta para todos los comensales y además con ingredientes de temporada.
La combinación de sabores en este salmorejo es sorprendentemente perfecta.
Es una receta con un valor nutricional muy interesante, ya que podemos considerar este plato completo nutricionalmente hablando. Gracias a que gran parte de la receta la protagoniza el tomate tendríamos la ración de vegetales necesaria cubierta. Además, el aporte de grasas saludables que el aceite de oliva virgen extra nos ofrece es ideal y el aporte proteico por parte de los gambones salvajes es de excelente calidad nutricional. Su fácil digestión la hace perfecta tanto para una comida como incluso una cena.
Una receta diferente, original y realmente deliciosa. Muy sencilla de realizar y así poder sorprender a quien tú quieras, donde tú quieras.
Salmorejo se le llama a una crema que se sirve en frío, cuyo origen proviene de Córdoba. Su ingrediente principal es el tomate. A él le siguen el pan blanco, el aceite de oliva virgen extra, la sal, el vinagre y el ajo.
Además de éstos ingredientes, quien se aventura a buscar nuevas versiones pueden añadir ingredientes extra como el huevo duro o un poco de jamón picado.
Es una crema que se elabora haciendo un machacado o majado de del pan con el ajo, sal y el aceite y se termina triturando todo con los tomates.
Información adicional sobre el ingrediente destacado:
Nutricionalmente hablando el salmorejo es un plato repleto de micronutrientes sumamente necesarios para nuestros procesos metabólicos y bienestar general. El tomate, ingrediente principal, alcanza su punto de madurez óptimo esta temporada de verano, por lo que su aporte nutricional estará en sus máximos niveles.
El aporte de vitaminas A y C es excelente y además su aporte de minerales y de compuestos como el licopeno hacen de él un plato antioxidante y muy saludable. Su aporte graso es muy bajo y las grasas que nos aporta, provenientes del aceite de oliva virgen extra, lo convierte en una receta cardiosaludable y en un buen aliado para la pérdida de grasa.
Para el salmorejo:
Para las láminas de gambón: