Para las empanadillas de bonito y ciruela: Picamos finamente el puerro y el ajo y lo salteamos en una sartén con aceite de oliva virgen extra. Troceamos por la mitad los tomates cherry y los agregamos a la sartén. Cocinamos durante 5 minutos hasta que reduzcan de tamaño y se vayan convirtiendo en salsa. A continuación, agregamos el queso feta, la ciruela pelada y troceada y el bonito.
Salpimentamos al gusto y cocinamos hasta que el queso se derrita y todos los ingredientes se integren. Reservamos y dejamos templar la mezcla.
Disponemos las láminas de masa filo sobre la encimera y las cortamos longitudinalmente en 3 partes.
De cada franja que hemos cortado utilizaremos 2 láminas a la vez y las estiramos una encima de otra sobre la encimera. Disponemos en el extremo de la franja de masa filo dos cucharadas del relleno de bonito y ciruela que hemos preparado previamente. Vamos haciendo pliegues triangulares con las láminas de masa filo, dejando el relleno dentro. Cuando lleguemos al final de la franja de masa filo, cortamos la parte restante haciéndola coincidir con uno de los bordes de la empanadilla.
Pintamos las empanadillas con huevo batido en la parte superior y dentro del último pliegue de la masa filo para ayudar a que se pegue y se cierre bien.
Disponemos las empanadillas sobre la bandeja de horno forrada con papel vegetal y las horneamos durante 20 minutos a 180 ºC hasta que la superficie de las empanadillas se vea dorada y crujiente.
Para la salsa de yogur: Mezclamos en un bol el yogur griego, el jengibre, la sal y exprimimos el zumo de 1/4 de limón.
Servimos las empanadillas de bonito y de ciruela acompañadas de la salsa de yogur. Las empanadillas se pueden tomar tanto frías como calientes.
Para las empanadillas de bonito y ciruela
