La fruta es un grupo de alimentos que aporta una gran cantidad de vitaminas, minerales y fibra al cuerpo.
Debe incluirse varias veces al día en la alimentación de los más pequeños, y una forma para incorporarla cuando se empieza la alimentación complementaria, puede ser en forma de potito.
Recuerda incorporar las frutas de una a una, para ver la tolerancia de tu pequeño, y una vez las hayas introducido todas, las puedes mezclar entre sí. Si incorporas la manzana, debe ser cocida para evitar problemas de atragantamiento, pero si la mezclas con otras frutas y la trituras, sí que puedes ofrecerla en crudo.
Cuando prepares un potito, debes darlo al momento para conseguir que no se oxiden las vitaminas. Te recomendamos que si te sobra potito no lo guardes para el día siguiente, pues se oxida y al entrar en contacto con las babas del bebé podría estropearse.
Este potito destaca por su alto contenido en vitamina C, con una importante función de mantener el sistema defensivo en un buen estado.
Pelamos el kiwi y el plátano y los cortamos a dados.
Preparamos el zumo de las mandarinas.
Pelamos la manzana, le quitamos el corazón y la cortamos a dados.
Con ayuda de una batidora, trituramos los trozos de kiwi, plátano, manzana y el zumo de mandarina.
¡Una merienda cargada de vitaminas!