Para la crema de avellanas: calentamos la leche y en un bol aparte mezclamos las yemas de huevo con la harina fina de maíz, el azúcar y la crema de avellanas.
Cuando la leche comience a hervir, añadimos la mezcla anterior y calentamos hasta espesar removiendo continuamente. Reservamos en frío en una manga pastelera.
Para la nata montada: la batimos hasta montar y reservamos también en una manga pastelera.
Para el milhojas: utilizamos una torta de base y sobre ella extendemos la crema pastelera. La cubrimos con otra torta, disponemos la nata y tapamos con una torta más. Decoramos con arándanos, miel, un poco de chocolate rallado y… ¡a disfrutar!
Os va a encantar la receta que os proponemos, ¡sencilla y deliciosa! El milhojas es un dulce tradicional atribuido a la repostería francesa. Es un pastel de forma rectangular, que contiene merengue o crema pastelera entre dos capas de hojaldre. Nosotros os proponemos que en vez de hojaldre utilicéis tortas sevillanas con aceite de oliva, quedará mucho más sabroso. Generalmente el milhojas lleva espolvoreado azúcar glas, pero nosotros hemos utilizado, miel, chocolate y arándanos, que aportan un ligero toque ácido pero sin duda delicioso, además, son especialmente ricos en antioxidantes.
Para la crema de avellanas:
Para la nata montada:
Para el milhojas: