¡Vaya! ¡Parece que hoy tenemos visita!… Unos seres muy simpáticos han aterrizado con su nave en un plato de nuestra cocina, y empiezan a descender de ella. ¡Son unos graciosos marcianitos! Este postre o merienda va a ser un momento muy divertido, ¡venga, que ya han aterrizado!
El plato que os proponemos a continuación es un plato de fruta que bien puede ser una parte del desayuno o media mañana, puede servir de postre o de merienda. Esta receta se elabora con kiwi, piña y pera. Son tres tipos de fruta que suele gustar a los niños mucho. Entre las tres, el niño ingiere vitaminas muy necesarias para su organismo, como la vitamina C, por ejemplo, y otras sustancias que ayudan en su crecimiento y desarrollo.Las frutas no suelen ser un alimento conflictivo para los niños, pero si bien es cierto que enseguida se suelen distraer en las horas de las comidas, con una receta como la que proponemos será mucho más difícil que quieran mirar o jugar con otras cosas.
Para elaborarla podéis hacerlo sin ellos para sorprenderlos, o hacerlos partícipes. Si los hacéis partícipes, además de pasar un rato divertido y entretenido, el niño aprenderá la importancia de las frutas, la necesidad de comerlas y aprenderá a valorar la importancia de la planificación de menús y preparación de los platos.
¡Vamos a la cocina que ya llegan los marcianitos!
Para empezar a elaborar nuestros marcianitos, lo primero que tenemos que hacer es preparar la fruta: pelamos el kiwi y la pera. A continuación, cortamos solo el kiwi en 4 trozos, con cuidado de no dejar piel en la fruta.
A modo de piernas de los marcianitos y de la nave espacial, ponemos los palitos de chocolate. Y para montar la nave colocamos una rodaja de piña encima de la pera pelada.
En cada trozo del kiwi, con una manga pastelera, ponemos un puntito de queso crema y colocamos en medio una lágrima de chocolate. Si no tenemos manga pastelera, podemos coger una bolsa de cierre hermético y cortar una de las esquinas inferiores.
Es el momento de terminar este plato de otro planeta: ponemos 3 fideos de chocolate a modo de pestañas en los ojos que hemos hecho con la crema de queso en los marcianitos y colocamos las bolitas de chocolate en la piña para terminar nuestra nave.
Y ahora… ¡a ver qué cara ponen cuando los vean aparecer!
