Para la ensalada de lentejas, cortamos el pepino en cubos y la cebolla y el pimiento rojo en dados pequeños. Partimos los tomates cherry a la mitad y laminamos las aceitunas verdes.
En un bol disponemos las lentejas previamente escurridas, incorporamos los ingredientes cortados previamente y removemos.
Para la salsa de aguacate, partimos el aguacate y lo trituramos junto con zumo de limón, el aceite de oliva, el perejil y una pizca de sal. Trituramos el conjunto hasta obtener una salsa homogénea, suave y cremosa.
En un cuenco disponemos unas cucharadas de ensalada y terminamos con unos hilos de salsa de aguacate y queso feta desmigado.
Llega el verano, y lo primero que nos apetece para comer son cosas frías. Esta ensalada es un ejemplo perfecto. Podemos destacar que es una receta vegetariana y apta para personas con celiaquía, aunque siempre es importante revisar las etiquetas para confirmar que no puedan contener trazas. Si usamos un queso vegano será también una receta vegana.
La ventaja de las ensaladas, es que podemos usar infinidad de fuentes proteicas para combinar y crear platos nuevos, así como una gran variedad de aliños.
Tenemos una buena fuente de verduras, junto con la proteína de calidad que nos aportan las legumbres, junto con el queso feta.
Información nutricional sobre el ingredientes destacado:
Las lentejas, son el ingrediente principal de esta receta. Hablamos de una de las legumbres más consumidas en España. Generalmente las utilizamos sólo en guisos, pero nos permiten una gran variedad de elaboraciones. Podemos usarlas, como en esta receta, en ensaladas o bien para hacer una crema o untables, al igual que haríamos con el garbanzo en el humus. También nos permiten, a partir de triturarlas, usar esa harina para hacer pasta de lentejas, una variante muy común hoy en día.
A nivel nutricional, destacan por su aporte tanto de proteínas cómo de hidratos de carbono. También son ricas en ácido fólico, hierro, potasio o magnesio.
Es posible que las legumbres, sobre todo si no se consumen con frecuencia, puedan generar más gases o digestiones más pesadas. Con las lentejas tenemos un as en la manga, ya que podemos usar lenteja roja pelada, que podemos comprar ya cocinada, que disminuye mucho esta situación, pudiendo consumirlas de manera frecuente sin inconvenientes.
Para la ensalada de lentejas:
Para la salsa de aguacate: