Para los vol au vent: rellenamos la base de los mini hojaldres con cebolla caramelizada, añadimos la mousse con ayuda de una manga pastelera de boquilla estrellada y decoramos con lomo asado enrollado en la superficie.
Para el bizcocho de tomate con paté: separamos las claras de los huevos y las montamos con un poco de sal. Mezclamos con harina, mermelada de tomate, sal y pimienta negra hasta homogeneizar.
Hacemos unas pequeñas incisiones en la base de unos vasitos de cartón, rellenamos con la mezcla anterior y llevamos al microondas durante 40 segundos aproximadamente. Dejamos enfriar boca abajo, desmoldamos y cortamos en discos de unos 2 cm de grosor.
Sobre los discos, disponemos una quenelle de paté, un puntito de crema de queso con ayuda de una manga pastelera y terminamos con huevas de lumpo y una hojita de rúcula.
Para los canapés de garbanzo: trituramos garbanzos con harina, agua, pimienta y sal hasta homogeneizar. En una sartén con aceite, doramos pequeños círculos de masa por ambos lados. Montamos los canapés a base de boletus caramelizados, tomate seco en dados, finas láminas de pepino enrolladas y de rabanito y canónigos y… ¡a disfrutar!
No hay ningún problema si no disponemos de sifón en casa. Podemos seguir elaborando este bizcocho en el microondas cambiando ligeramente las proporciones de los ingredientes, doblando la cantidad de harina. Aunque el resultado no sea idéntico nos saldrá un bizcocho igualmente sugerente.
A la hora de utilizar el sifón hay que ser muy cuidadosos ya que puede ser peligroso hacer un mal uso del mismo. Lo más importante es que una vez hayamos cargado el sifón, por nada del mundo podemos abrirlo sin haberlo vaciado antes ya que por la presión nos puede estallar. Para hacerlo de forma segura hay que vaciarlo por completo, poniéndolo boca abajo y presionando hasta que dejemos de escuchar ningún ruido.
Para usar bien el sifón debemos tener en cuenta varias claves. Por un lado debemos asegurarnos de que las gomas y diferentes partes del mismo estén bien colocadas y cerradas. También es importante no llenar en abundancia el sifón, ni de contenido líquido ni de cargas, la capacidad de nuestro sifón nos indicará sus límites. Por otro lado, debemos agitar el sifón cada vez que añadamos las cargas y en el momento de utilizarlo colocarlo boca abajo. Hay que tener cuidado de que lo rellenemos con masas finas, ya que los grumos podrían obstruir las válvulas.
En este caso son estas las combinaciones que proponemos, pero lo divertido de estos aperitivos es utilizar los ingredientes que se nos ocurran para adaptarlos a nuestros gustos y personalizarlos a deseo. Por ejemplo, los mini hojaldres se pueden rellenar con lo que más nos apetezca. Podría ser divertido hacer una degustación de diferentes mini vol au vents, teniendo una opción vegana, otra de marisco, otra de carne y ¿por qué no una dulce?.
En esta receta, tenemos 3 aperitivos para poder presentar en fiestas o comidas familiares, y tener una opción distinta que no requiere ser un chef experto.
A nivel nutricional, cada receta nos aporta algo distinto. En las 3 opciones tenemos fuentes de hidratos de carbono, tanto en los mini hojaldres como en la harina de trigo para los bizcochos y los canapés. En cuanto a la proteína, en el primer aperitivo la aporta el lomo, en la segunda viene por parte de los huevos y el paté. En la última receta, tenemos una fuente de proteínas de origen vegetal en los garbanzos.
Siempre será una buena opción añadir una fuente de verduras. Puede ser en otro tipo de entrantes o en las opciones de los primeros o platos principales.
Si usamos una harina sin gluten, las 3 opciones serán aptas para personas con celiaquía.
Información nutricional sobre el ingrediente destacado:
En esta receta podemos destacar un ingrediente principal en cada uno de los entrantes. En la primera opción podemos destacar, por orden, el lomo asado, los huevos para el bizcocho y los garbanzos.
Las 3 opciones destacan por ser una fuente de proteínas de calidad.
El lomo de cerdo, es una de las partes con menor aporte graso, por lo que su perfil lipídico es algo más bajo. También aporta una proteína de calidad, así como vitaminas del grupo B, principalmente.
El huevo, se considera prácticamente el estándar de calidad proteica por sus aminoácidos y su alta digestibilidad. En el huevo encontramos proteína tanto en la yema como en la clara. No tenemos que limitar su consumo, podríamos consumir 1 o 2 huevos al día sin problemas.
El garbanzo, es una proteína de calidad de origen vegetal que también nos aporta hidratos de carbono. Si mantenemos la piel, también nos aporta fibra.
Para el vol-au-vent con cebolla caramelizada, mousse de bonito y piparras y lomo asado:
Para el bizcocho de tomate con paté:
Para los canapés de garbanzos con boletus: